Cada año, más personas se replantean su forma de trabajar. Muchos abandonan los empleos tradicionales en busca de mayor flexibilidad, equilibrio entre la vida laboral y personal, así como una mejor remuneración. Plataformas como Instawork ayudan a estas personas a trabajar en sus propios términos, no como empleados, sino como contratistas independientes. En otras palabras, son autónomos.
Aunque convertirse en contratista independiente conlleva algunos cambios, muchos de ellos son emocionantes. He aquí algunas de las cuestiones clave que debes saber sobre el proceso.
1. Tú estableces tu propio horario
Una de las mejores partes de ser un contratista independiente es que puedes elegir tu propio horario de trabajo. La mayoría de los empleados tienen horarios que les indican cuándo y cuánto tiempo tienen que trabajar. Para los trabajadores por hora, los horarios suelen cambiar de una semana a otra. Esto puede dificultar la planificación del cuidado de los niños, las diligencias y las salidas con los amigos.
Sin embargo, como contratista independiente, tu horario depende de ti.
Puedes trabajar tanto o tan poco como quieras según tus necesidades, no las de la empresa.
Y puedes elegir trabajar cuando te convenga. ¿Eres padre o madre? Entonces puedes asegurarte de trabajar sólo en los momentos en los que tienes a alguien encargado del cuidado de tus hijos.
También puedes elegir cuándo no quieres trabajar. Eso significa que ya no tienes que preocuparte de que tu horario de trabajo arruine tus planes para el fin de semana o un día festivo. Incluso puedes elegir un tiempo libre prolongado si quieres tomarte unas vacaciones, sin necesidad de aprobación.
2. Los impuestos no se deducen automáticamente de tu sueldo
Cuando eres un asalariado, la empresa para la que trabajas te descuenta los impuestos de tu sueldo. Al final del año, te envían un formulario llamado W2 que dice cuánto te han pagado y cuánto han deducido. Luego, tú utilizas esa información para rellenar tus formularios de impuestos.
Como contratista independiente, las cosas son un poco diferentes. Todas las empresas para las que trabajes te pagarán el monto total que hayas ganado, sin deducir impuestos. Pero es probable que tengas que pagar impuestos trimestrales estimados de acuerdo con los ingresos que obtengas. (Puedes encontrar más detalles sobre cómo funciona eso aquí).
Pero aún así tendrás que presentar los impuestos anuales antes del 15 de abril de cada año para asegurarte de que has pagado la cantidad correcta. Las empresas para las que has trabajado te enviarán un documento llamado 1099 que dice cuánto te han pagado. Luego, utilizarás esa información para rellenar tus formularios de impuestos. Puede ser un poco confuso, por lo que te conviene utilizar una herramienta como:
3. Puedes deducir muchos gastos de trabajo
Como contratista independiente, a menudo tienes que gastar dinero para mantener tu negocio funcionando. Por suerte, el IRS te da un respiro en ciertos gastos relacionados con el trabajo, como los suministros de trabajo y el seguro médico. Si documentas correctamente estos gastos, el gobierno te devolverá algo de dinero de los impuestos. A continuación te explicamos cómo:
- Conoce qué gastos puedes deducir. Encuentra una lista fácil de entender aquí, y las directrices completas del IRS aquí.
- Registra tus gastos. Registra tus gastos en una hoja de cálculo, un cuaderno o una herramienta de contabilidad. Cuando llegue la temporada de impuestos, utiliza esta información para rellenar los campos de deducción en tus formularios fiscales.
- Guarda los recibos. Guarda el recibo de cada gasto elegible y clasifícalo por categorías. (Una carpeta para los recibos de suministros de trabajo, otra para los recibos del seguro médico, etc.)
- Consigue el reembolso. Si lo has hecho todo bien, El IRS restará la cantidad que has pagado en gastos de la cantidad que debes. El resultado final es una factura de impuestos más baja, o una devolución de impuestos más alta.
Los impuestos pueden ser una molestia, pero las deducciones pueden ahorrarte cientos (o incluso miles) de dólares al año. ¡Así que no te las saltes!
4. Tus beneficios cambiarán
Los contratistas independientes se benefician de más flexibilidad y libertad. Pero hay ciertas ventajas que los empleados tienen y que ellos no. Por ejemplo, las empresas deben ofrecer a los empleados prestaciones por desempleo y compensaciones laborales. Los empleados a tiempo completo también suelen tener seguro médico. (Pero ten en cuenta que puede ser difícil encontrar trabajos de primera línea a tiempo completo).
Sin embargo, eso no significa necesariamente que no debas ser un contratista independiente. Hay soluciones para cosas como:
- Seguro médico. Es posible que puedas afiliarte a un plan como dependiente o recibir un plan gratuito o con descuento a través de HealthCare.gov
- Ahorro para la jubilación. Las cuentas IRA son una buena alternativa a los 401(k) y las pensiones
- Indemnización por accidente de trabajo. Siempre que trabajes un turno a través de Instawork, cubrimos el Seguro de Accidentes de Trabajo
5. Puedes tener más variedad
Los empleados suelen ser contratados para un trabajo concreto y están atados a cualquier empresa con la que firmen una oferta. Los contratistas independientes, sin embargo, tienen más libertad. Tú puedes elegir:
- Qué tipo de trabajo realizas
- Para quién trabajas
- Cuántos clientes aceptas
- Y más
"Me aburre mucho trabajar siempre en el mismo sitio... [con Instawork] he sido capaz de utilizar diferentes conjuntos de habilidades, y aprender a mi favor."
- Bryin W., Profesional de Los Ángeles
Al final, no hay una sola forma correcta de trabajar. Todo depende de tus circunstancias, preferencias y prioridades. Lo mejor es que reúnas toda la información posible para tomar una decisión acertada.
Pero si eres una persona emprendedora a la que le gusta la flexibilidad y la variedad, el trabajo por contrato independiente puede ser adecuado para ti. Y si lo es, ¡nos encantaría que te unieras a la comunidad Instawork!
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